El glamping o lo que podría también denominarse camping con glamour, gana seguidores, y no es de extrañar teniendo en cuenta las tendencias de turismo que se van afianzando.
Los viajeros buscan viajes y alojamientos llenos de personalidad en el que se de un vínculo con la naturaleza y con el turismo rural pero, además sin alejarse demasiado de casa.
Teniendo en cuenta todo esto, los alojamientos que estarían incluidos dentro del glamping, tienen que ofrecer algo más que un lugar en el que poder dormir, sino que tienen que ir más allá y convertir este hecho en toda una experiencia sin perder el confort y el lujo.
El glamper, como se denomina al usuario del glamping, busca en definitiva, camas de lujo, baños privados, que no haya insectos, algo frecuente cuando se está rodeado de naturaleza y por supuesto, sin penurias de temperatura ni por calor ni por frío. Es decir, que tenga a su alcance todas las comodidades que se necesitan para descansar.
Una experiencia sin duda ideal para desconectar y disfrutar de la naturaleza.
¿Lo has probado ya?